5. ¡Justicia climática!
Fortalecimiento en la prevención y lucha contra la corrupción en situaciones
y, además, han impactado en lugares donde prevalece la pobreza, desigualdad, inseguridad alimentaria y el desplazamiento.
En el caso de México, es uno de los países más vulnerables del mundo ante el cambio climático debido en buena parte a sus características geográficas –con más de 15,000 kilómetros de costa–, pero también es uno de los 15 mayores emisores de gases de efecto invernadero con el 1.47% del total mundial y la petrolera estatal, Pemex, se sitúa entre las diez empresas más contaminantes del mundo (El País, 2021). Adicionalmente a ello, México es especialmente vulnerable frente al calor extremo y la sequía, lo que podría llevar a la inseguridad alimentaria e hídrica. Por ejemplo, la Ciudad de México, la séptima ciudad más poblada del mundo con más de 21 millones de habitantes, ya está en peligro de quedarse sin agua (Yale Climate Connections, 2024).
Reconociendo que los riesgos de corrupción pueden aumentar en situaciones de emergencia climática y en la respuesta a las crisis y la recuperación posterior, ya que la urgencia de las necesidades, la gran demanda de ayuda económica y sanitaria y la rapidez con la que el Estado Mexicano debe responder crean oportunidades para que se den delitos de corrupción, la cual dificulta aún más los esfuerzos de respuesta y recuperación.
Es así que instamos al Gobierno mexicano a utilizar de manera plena y eficaz la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción para desarrollar, mejorar y fortalecer las políticas y estrategias contra la corrupción a fin de garantizar la preparación para emergencias y hacer frente a la corrupción en situaciones de emergencia y en la respuesta a las crisis y la recuperación posterior.
Además debe de contar con información pública completa, certera y fidedigna para ayudar a la identificación de problemáticas económicas y sociales para la generación de soluciones que propicien el acceso pleno a los derechos básicos de la población, tales como la vivienda, la salud o la educación, por ejemplo, realizando censos de personas afectadas y listas de beneficiarios finales, tomando en cuenta, especialmente los sistemas de opresión con las que son atravesadas las personas con mayor desigualdad, como el género, condición socioeconómica, orientación sexual, lugar geográfico de pertenencia, condición étnica-racial, entre otros
También debe fortalecer la cooperación internacional y multilateral para fomentar la prevención, detección, investigación y enjuiciamiento de la corrupción en situaciones de emergencia y en la respuesta a las crisis y la recuperación posterior.
Sobre este punto, que tiene como objetivo proveer información socialmente útil, para la población afectada, a partir de la identificación de información relevante, de fácil acceso y en lenguaje sencillo, así como de las necesidades más sensibles de información en el marco de las situaciones de emergencia ocasionadas por los huracanes que afectan al país.
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